Hemos estado en este Hotel una semana, aspectos positivos, la habitación es cómoda y bonita, el colchón y la cama muy bien y la limpieza.
Es un hotel de reciente construcción, la piscina es de un tamaño un poco más pequeño que las de los hoteles españoles pero suficiente. La comida estaba muy rica, tienen unos cinco o seis primeros y cinco o seis segundos, dos o tres postres dulces y cuatro variedades de fruta, dos de ellas siempre es melón y sandía de la zona. Casi todo lo que hay en el menú es verdura, poca carne y pescado, yo encantada.
Esta muy cerca de la playa a un minuto, pero no en primera línea, en realidad el hotel da a una carretera bastante transitada, pero como tiene ventanas de calidad cierras por la noche y duermes con el aire, sino no se puede. El aire funciona muy bien.
Los horarios para comer son reducidos y estrictos dos horas para cada franja horaria empiezan siete y media (desayuno)doce y media (almuerzo), siete y media (cena), son muy estrictos y cierran puntualmente el servicio de comida. En general en la zona es así.
Las playas tienen servicio de hamacas del hotel y hay un montón de filas de hamacas, no sé cobran para los clientes, la playa es bonita de arena marróncita, aguas que no son claras y algunas algas, tipo las de Huelva pero mas estrechas. El agua está muy bien de temperatura.
Aspectos a mejorar: el régimen de todo incluido light con el que íbamos es confuso, es una pensión completa de toda la vida, la bebida incluye agua, cerveza, vino, y algún alcohol que rellenan en las botellas y solo te lo dan en el horario de comida en el hotel, en otros horarios lo cobran y en el chiringuitos de la playa lo cobran siempre.(Que le cambien el nombre y listo). No me ha gustado nada que la bebida te la ponen en vasos de plástico pero descubrimos que si pides el vaso para la cerveza fresquita en el bar ya lo puedes rellenar y pasas del vaso de plastico.
El personal del hotel de la recepción y comedor es adolescente prácticamente, pero a mí me ha sorprendido porque están muy atentos y son amables eso sí me he hartado de escuchar reggaeton porque ellos eligen la música y no tienen en cuenta el gusto del cliente, ponen lo que les gusta, si les pides que la cambien no tienen problema.
El último día tuvimos un episodio desagradable porque cuando entregamos la tarjeta para dejar la habitación a las tres de la mañana para que el transporte nos llevará al aeropuerto te revisan el minibar para ver si has consumido, éramos un grupo grande de españoles y a otros clientes les obligaron a pagar tres euros porque decían que habían consumido algo y los clientes se negaron porque dijeron que era mentira, nos cerraron la puerta a todos hasta que no pagaran y la gente se enfado bastante . Así que cuidado con lo de minibar, los de la agencia dijeron que nunca había sucedido nada parecido, a pesar de todo mi valoración en general es positiva pero se nota que están empezando en esto del turismo y no tienen mucha mano izquierda.
Voyager175171289992024-07-27